¿Inversión a largo o a corto plazo? Comparación de las dos estrategias

Invertir en la bolsa de valores es una de las muchas formas de ganar dinero. Sin embargo, la forma de invertir depende de tus preferencias, metas y tolerancia al riesgo. Este artículo trata sobre dos estrategias fundamentales de inversión en la bolsa de valores: a largo plazo y a corto plazo. La inversión a largo plazo en la bolsa es una estrategia en la cual el inversor compra activos y los mantiene durante un periodo extenso (generalmente años o décadas). Se puede invertir en acciones, bonos, bienes raíces, metales preciosos e incluso en bloques de Lego. Hay muchas opciones.

Muchos inversores emplean la estrategia a largo plazo porque creen que las inversiones se vuelven más valiosas con el tiempo, y los cambios de precio a corto plazo no son significativos. La inversión a largo plazo requiere paciencia, disciplina y perseverancia. Muchos también recomiendan la diversificación del portafolio, distribuyendo el dinero en diferentes activos como acciones o bienes raíces.

Ventajas de la inversión a largo plazo

Menos riesgosa: las inversiones a largo plazo son menos riesgosas que las inversiones a corto plazo, ya que los cambios de precio a corto plazo no afectan significativamente el rendimiento de la inversión.

Posibilidad de obtener ganancias por dividendos, por ejemplo, al invertir en acciones. Los inversores a largo plazo a menudo tienen la oportunidad de obtener ganancias de los dividendos pagados por las empresas en las que invierten. Esto significa que los inversores pueden ganar dinero con acciones que pagan dividendos sin depender en gran medida del aumento del valor.

Menos tiempo dedicado al análisis del mercado: los inversores a largo plazo necesitan menos tiempo para seguir los cambios en el mercado, ya que sus inversiones son más resistentes a los cambios de precio a corto plazo. Esto significa que los inversores a largo plazo tienen mucho más tiempo para reflexionar sobre las decisiones de inversión. También operan con menos emociones.

La estrategia de inversión a corto plazo es un tipo de estrategia en la cual el inversor intenta vender sus activos en un período muy corto, generalmente unos pocos días o semanas. A aquellos que estudian con frecuencia los mercados se les llama day traders. Los inversores adoptan esta estrategia porque creen que pueden prever y aprovechar los cambios en el mercado.

Ventajas de la inversión a corto plazo

Ganancias rápidas: los inversores a corto plazo pueden obtener ganancias rápidas si pueden prever con precisión los movimientos del mercado y realizar inversiones adecuadas. Utilizan la especulación sobre las subidas y bajadas del mercado, analizando el mercado y tomando decisiones basadas en ello. De esta manera, pueden vender fácilmente sus participaciones y mudar la inversión a una empresa más rentable.

Posibilidad de obtener ganancias de la volatilidad del mercado: la inversión a corto plazo permite a los inversores obtener ganancias de la volatilidad del mercado. Los inversores a corto plazo pueden comerciar rápidamente con bitcoin, acciones e incluso participaciones en empresas cuyo valor está disminuyendo. Por lo general, los venden cuando el valor de la empresa aumenta.

Requiere inversiones más pequeñas: las inversiones a corto plazo suelen requerir inversiones más pequeñas que las inversiones a largo plazo, ya que los inversores a menudo compran acciones a precios bajos y las venden cuando el precio sube unos pocos puntos porcentuales. Los inversores también pueden obtener ganancias con inversiones más pequeñas.

Desventajas de la inversión a corto plazo

Mayor riesgo: las inversiones a corto plazo son más riesgosas que las inversiones a largo plazo, ya que se deben prever los cambios del mercado en un corto período. Esto es difícil y requiere mucho trabajo. Además, la necesidad de comerciar con frecuencia aumenta los costos de transacción y, por lo tanto, el riesgo de pérdidas.

Requiere más tiempo: los inversores a corto plazo deben dedicar más tiempo al seguimiento de los movimientos del mercado y al análisis de las empresas en las que invierten. Esto significa que los inversores a corto plazo tienen menos tiempo para reflexionar sobre las decisiones de inversión y analizar las empresas en las que invierten.

Más impuestos: las inversiones a corto plazo conllevan impuestos más altos que las inversiones a largo plazo, ya que los inversores deben pagar impuestos sobre cada transacción.

En resumen, la elección entre inversiones a largo plazo e inversiones a corto plazo depende de las preferencias, metas y tolerancia al riesgo. La inversión a largo plazo requiere paciencia, disciplina y perseverancia, pero es menos arriesgada y proporciona rendimientos estables a largo plazo. Las inversiones a corto plazo son más arriesgadas y requieren más conocimientos y tiempo, pero pueden proporcionar rendimientos rápidos en poco tiempo. Es importante destacar que algunos inversores combinan con éxito ambas estrategias, invirtiendo parte de su capital a largo plazo y parte a corto plazo. Como resultado, se benefician tanto de la estabilidad a largo plazo como de las oportunidades de ganancia a corto plazo.

No hay una estrategia de inversión en la bolsa de valores que sea ideal para todos los inversores. Es importante entender tus metas y preferencias de inversión, así como educarte en el ámbito de la inversión. En última instancia, la inversión requiere tomar decisiones basadas en hechos, no en emociones.

 

Autor: Jorge Pérez